La zona del miedo.

¿Porqué le llamamos zona de confort cuando en realidad es la zona del miedo? 

La pertenencia es un reducto de cuando se vivía en tribus, la familia es lo mismo, miedo a estar fuera.

Fuera de la familia están los lobos, fuera de la tribu está la muerte, la soledad, la indefensión.

La zona de confort es una forma amable de llamar al miedo, sin ese miedo nos lanzaríamos fuera, viviríamos de acuerdo a nuestro ser, viviríamos desafiando a la propia vida, al orden social, a la civilización.

La zona de confort es una cárcel, una casa miserable rodeada por una pared de tochos y una alambrada, es el muro de Ceuta y Melilla, concertinas y tela metálica, el mundo es eso, y los que intentan saltarlo les sacuden de porrazos, los que descubren que su zona es la muerte, quieren ir a otra sin saber que es más de lo mismo pero al menos se come con suerte y se les margina por el color de la piel cuando en realidad se les quiere expulsar por enseñarnos el miedo de fuera. El exterior no existe, hay que destruirlo.

Todo eso entraña un peligro, de ahí la insistencia al miedo constante por parte del sistema y por llamar a las cosas con el nombre contrario al que tienen, al ejercito para matar, se le llama ministerio de defensa, a los espías, servicio de inteligencia, la guerra es paz, y el miedo, confort.

Ahí dentro de esa zona confortable, solo hay tedio y ansiedad, represión, y una idea de que la muerte está ahí fuera, simplemente para que no te vayas y siga la civilización, para que no dejes de ser esclavo.

Cuando lo que hay fuera realmente es la vida porque la muerte está en nosotros, no es el exterior.

Los libros de autoayuda hablan de salir de tu zona de confort, y nunca abordan la verdad del asunto, simplemente te ofrecen opciones para esclavizarte todavía más, opciones de la autoexplotación, se tu propio jefe, abandona el sistema social, lo único bueno que tiene nuestra civilización y conviértete en francotirador del sistema. Con esos libros el sistema te enseña el confort de la misma manera que a la guerra se le llama paz. Son manuales de entrenamiento.

Que bonito sería no tener miedo, no tener culpa y desarrollarnos y dar lo mejor de nosotros mismos.

Llamemos a las cosas por su nombre. Zona del miedo. 

Todo esto no se a que venía, es domingo.

Escuchad algo que os alegre como esto. 





Comentarios

  1. El miedo paraliza, y la única manera de vencerlo es moverse de lugar. Gran escrito para un domingo de bajón e incertidumbre...

    ResponderEliminar
  2. Joder Juanjo, has hecho que me entrase el miedo! Pero ese tema del Achtung Baby me ha devuelto a mi ser tranquilo e impasible. Hace años que pienso en que moriré joven, por eso tengo 3 hijos, para que mi falta no sea demasiado traumática, sino una anécdota más en la vida de ellos. Menuda mierda, mañana es lunes.

    ResponderEliminar
  3. Atravesar la zona de confort es dar la bienvenida a la incertidumbre. Es sentirse incómodo, inseguro y a verlas venir. Muchos animan a romperla y asegurando que eso es la vida. Yo digo que debe haber un mínimo de confort. El cerebro es plástico , adaptativo y conservativo. Siempre va a buscar rutinas para sobrevivir. Pero sobrevivir no es vivir. Vivir es pasar nervios, cabrearse y a veces decir basta. Pero a veces entre la oscuridad se cuela luz y momentos q merecen la pena. Eso, lo bueno y lo malo es vivir

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares