Tiempo en cintas de cassette.

Cuando era jovencito y escuchaba la música en mi Walkman, media los trayectos con la escucha de los discos, sabía que hasta llegar a la escuela Massana era la cara A del disco de los Stone Roses, o el de los Charlatans, el Seventh Son de Maiden hasta la cuarta. Medía los trayectos con los discos que me gustaban, con el III de Led Zeppelin, sabía perfectamente cuando estaba llegando por la canción y siempre tardaba lo mismo, con muy poca diferencia.

Si llegaba tarde pensaba, joer casi se termina la cara A y no he llegado todavía. Aunque a veces introducía variaciones y escuchaba directamente la cara B y también sabia hasta cuándo duraba mi trayecto.

Sabía cuantas cintas me tenía que llevar para escuchar en el coche hasta llegar a Taradell o sabía que el primero de Weezer lo escuchaba entero hasta que mi padre paraba con el coche para tomar algo a medio camino a Gurrea. 

El tiempo se ordenaba en cintas de 60 y 90, 30 o 45 minutos por cara, eso duraban los trayectos en general, en Barcelona los trayectos suelen durar media hora, una cara de una cinta, aunque los cassettes originales no eran tan exactos, no me gustaba grabar un disco y completar la cinta con otras canciones, respetaba el orden y las canciones de cada cara. Yo creo que esto lo hacíamos todos.

La vida, durante un tiempo, fue así.