Pam y Tommy

 Ayer terminamos de ver Pam y Tommy la fabulosa serie sobre el escándalo de la cinta porno romántica de Pamela Anderson y Tommy Gilipollas Mundial Lee. 

Aparte de confirmarme que Tommy Lee es un gilipollas de tomo y lomo y muy tonto, lo detesto y lo detestaré para siempre, he de reconocer que es muy buena la serie. Buena trama, caracterizaciones, interpretación dirección artística, vestuario. La verdad es que esta todo hecho a la perfección, acabas comprendiendo a todos los personajes incluso al gilipollas, que acabas viendo que estaba en su peor momento vital y con la autoestima por los suelos y necesitaba ligarse a la mujer más deseada de su mundo garrulo. 

Sin duda fue un amor verdadero, todos lo sabemos, se quisieron como dos locos, es hasta bonito ver a dos adolescentes tardanos amarse de ese modo.

Pero a lo que iba, a mi de chaval me encantaba Pamela Anderson, pero mucho, una atracción que yo mismo nunca comprendí hasta ayer, al ver terminar la serie. En mi mundo snob no podía reconocer que me  gustaba una tipa así, operada, sex symbol y novia de garrulos como Tommy Lee, yo me consideraba un intelectual, prefería decir que me gustaba Juliette Binoche, Winona Ryder, Isabela Rosellinni o cualquier estirada de esas y en realidad no, no me gustaban, eran unas pijas asquerosas, a mi en realidad siempre me han gustado las personas que la sociedad les ha dado de lado de algún modo, la gente abandonada de algún modo, siempre he detectado eso en mis parejas, personas que sufren y siempre me ha gustado sentirme útil en la pareja, hacer algo que sirva, influir de algún modo, construir algo.

También he de reconocer mi gusto primitivo por lo femenino, soy un garrulo por dentro, y la carne y lo físico me pierde, sin remilgos, una cosa bruta y animal.

Y Pamela era el cóctel perfecto, autodestructiva, frágil y animal, una Marilyn moderna, con biografías parecidas, es muy cutre, no lo se, no lo elegí yo, soy así, es absurdo negarlo.

Toda mi vida me la he pasado igual, nunca he formado familia, nunca ha sido mi prioridad organizar algo con mis parejas, solo me ha importado su crecimiento como personas y aprender de ellas y ellas de mi, luego me he ido y ellas han organizado su vida sin mi, y mucho mejor, he sido siempre una especie de puente hacia su vida de verdad. La mayoría luego han sido madres con otros tipos que son buena gente, pero conmigo nunca, yo tampoco quería, no era mi plan inconsciente.

La mayoría en su día me detestaron por dejarlas, las dejaba sin motivo claro, alguna vez si, se cruzaba otra misión en mi camino como si fuera un Batman canijo. 

Pamela es una tía fantástica que se le ha juzgado siempre por su aspecto, una chica que creía en la mierda del machismo y del amor romántico y eso la llevaba a cagarla una y otra vez y a intentar estar cada vez más buena a la espera del príncipe. Una chavala colgada con ascender a través de los tíos malotes, una chica con una autoestima derruida.

Ahora os reiréis, pero me alegré un montón cuando vi que iba a visitar a Assange a la embajada de Ecuador en Londres y se rumoreaba que estaban liados, pensé ahora ha elegido bien, como si fuera una amiga y luego pensaba ¿Y a mi me más me da? Ahora he entendido que ha cambiado de perfil de malote y al menos ahora es un rebelde intelectual anti-sistema.

Pamela, me alegro por ti. Ya pasó todo.