Death terapéutico contra la ansiedad.

 Me encuentro fatal, como el culo, con unas nauseas que te cagas desde ayer.

Ayer por la noche mientras veíamos el Viento se Levanta de Miyazaki, preciosa pero larguísima, me empezó a coger una ansiedad de dos pares de cojones, casi no puede ver terminar la película.

Mi cerebro me está jugando una de sus malas pasadas, yo creo que todo empezó con una supuesta alergia del diablo que suelo solucionar con antiestamínicos, me suele durar solo unas horas, es alergia, pero esta vez con el efecto rebote post pandémico creo que ha sido un resfriado de mierda y me temo que las pastillas de la alergia lo que han hecho es disimularlo y cortar el moco.

Ahora tengo unos mocos espesos como el pegamento, imposibles de sacar y me que dan unas arcadas muy parecidas a la ansiedad, lo cual me da más ansiedad y de eso en gran parte debe tratarse porque me sucede eso que yo llamo "el efecto milagro" es decir que el mal estar va y viene, me muero pero de repente se va y sin explicación lógica puedo escribir este post mientras muero.

Escribir hace que se me olvide el moco asqueroso en mi garganta, bajando por mi tráquea o donde sea que se dirija y al menos se reduce la ansiedad y simplemente estoy resfriado, es decir, obtengo alivio.

El hecho de sufrir de ansiedad lo complica todo mucho, nunca sabes realmente que te pasa, si es imaginación o es realidad, el colmo de todo esto fue cuando tuve una piedra en el riñón y creí que era fruto de mi imaginación hasta que lancé por mi pequeña escopeta un balín real que casi rompe la cerámica de mi inodoro de diseño.

Mientras os escribo esto estoy escuchando Death Metal terapéutico, también aprendí de la terapia conductual que no hay nada mejor que entregarse a lo peor, en este caso a la muerte y el dolor, curiosamente funciona, uno también obtiene alivio. 

No se me ocurre mejor manera que morir de ansiedad y moco pegado que escuchando los alaridos guturales de un buen grupo Death, os lo recomiendo a todos los que tengáis una mente paradójica como la mía.

Nada de escuchar mierdas relajantes como Enya, nos ponen todavía peor al ser totalmente incapaz de alcanzar ese puto nirvana asqueroso solo al alcance de las personas sin problemas. Oh que fácil resulta relajarse cuando todo está bien ¿no te jode? hijos de puta, ven aquí un rato a mi cabeza múltidisciplinar y frénala.

Solo funciona una cosa, las drogas que te de un médico, escribir o acelerar a tope con el Rock pesado e infernal del algún grupo muy asqueroso y satánico, que cante a la muerte y al dolor, que rinda pleitesía a la podredumbre y al asco existencial más profundo.

Tú también puedes morir esta noche.