Yago Hortal, la mano por detrás.

Ahora, un poco de  arte local. Yago Hortal Inaugura una nueva expo en Barcelona, con toda su jeta la titula ¿Otra vez?, ya solo con ese título se coloca a si mismo en el post conceptual o lo que sería "me meo en vuestra cara y encima me aplaudís y lo vendo todo" se sitúa en el mundo de la ironía por el que transita ahora el mercado del arte y lo que ellos creen que viene luego en la historia del arte, en lugar de subjetivismo y la identidad. Ellos siguen a la suya, con el "me cachondeo del mercado y de paso de ti" ese espacio que abrió Duchamp con inteligencia superior, petó Wharhol  y desmembró el resto de jetas  que hoy pueblan el arte, Koons, Hirts y algún otro memo con el riñón forrado que se me escapa ahora mismo y me da mucha pereza mencionar.

Yago Hortal, al que ya le tenía un poco de ojeriza por lo decorativo, al menos hacía pinturas bonitas, con bonitos colores y controlaba la materia pictórica, es decir la pintura en grandes cantidades de pomada y pincelada ¿Era chorra? Si, pero bonito también lo era un rato.

¿Y que le ha pasado ahora? Pues francamente no lo se, pero me lo imagino, la demanda y el aburrimiento, la falsedad y lo hueco que se rellena con la ironía que decía antes ¿Letras que pagar? ¿Hipotecas? ¿Memez? No lo se, pero se ha pasado a la pintura industrial y a la producción en serie, una suerte de Lichtenstein  pero ya sin la gracia del Pop y solo con colores que combinan muy bien con cualquier moqueta o mueble de diseño aunque sea diseño de Ikea, es la tomadura de pelo final, la explotación total antes de haberse forjado la leyenda que se lo permita, son tazas de Keith Haring antes de ser Keith Haring.

 Las nuevas "obras" de Hortal, definitivamente parecen hechas con un proceso industrial dignas de cualquier tienda de marcos o de taller de "transfers" o serigrafías molonas, son como todos esos pseudo cuadros decorativos a la Wharhol de las tiendas de decoración, no miento ni exagero. Ya no tiene ni la gracia de la destreza, es la nada absoluta bajo la premisa de el arte es todo lo que decide el artista que lo sea, un chiste que está muy divertido la primera vez que te lo contaron, pero una vez sabes como acaba ya no hace ninguna gracia y no paran de repetirlo una y otra vez porque les da dinero, gracias a unos galeristas, que francamente, parece que no les guste el arte ni la intelectualidad ni nada, ni siquiera ganan dinero con unos para poder hacer luego expos de otro tipo con gente que proponga ideas para este mundo lleno de confusión.

Da mucha pena y desconsuelo ver lo que está sucediendo en la mayoría de galerías de esta ciudad, van de culo en Instagram, venden obra en la plataforma, buscan hacer vídeos virales llevando obras al mercado de la Boqueria y demás tonterías sin sentido solo para buscar el "like" y la popularidad en las redes, ni siquiera son divertidos, provocadores o "underground", son ideas de "community manager" sin ningún tipo de sustancia.

En fin, estoy mas que harto de la tontería esta de crear objetos de regalo para ricos con la excusa de la posmodernidad ¿Dónde están las personas? ¿Dónde está la búsqueda? Se supone que la posmodernidad es crear a partir de referencias aunque sea con ironía, no copiar sin más y te lo envuelvo para regalo, cojones, son las películas de Tarantino, no esta basura. 

Iros a freír espárragos, ¿Otra vez? Si