Flea, el pesado sónico y Thom Yorke

No soporto a Flea, se que para muchos de vosotros es el mejor bajista del mundo, pero a mi todo su rollo espasmódico como de querubín epiléptico, me ha cargado toda la vida por encima de mis posibilidades de tolerancia. Es un pesado enciclopédico, excesivo y para colmo ultra técnico. No me interesa la técnica para nada a no ser que seas Dios y por suerte no existe, si fuera así ya habría acabado definitivamente con todos nosotros empezando por Flea.

No soporto a Flea ni a su maldito grupo, aunque reconozco que fui un poco fan y los vi una vez en la etapa Dave Navarro, menuda peste de combinación, y eso que Navarro en Jane's Addiction estaba muy bien, pero con los Red Hot Chily Peppers estaba ya muy gastado por la vida y más cosas, y sobre todo no pegaba para nada en un grupo, que a pesar de todo, nadie pega con nadie, se ve que esa era la gracia de los Chily Peppers, la lucha constante por el cetro de goma a ver quien lucia más y claro, a Flea no le gana nadie, es el típico chaval de la clase que se defendía de los demás diciendo "cuidao que estoy muy loco" y encima era verdad. A pesar de todo, ha escrito un libro de sus memorias que pinta bastante bien porque en la portada sale fumando siendo menor de edad y eso me gusta.

Pero el tema del que quería hablar no es nada de esto, sino de esa fusión incomprensible que hizo con Thom Yorke y que bautizaron como Atoms for Peace (eh??) ¿qué mierda de nombre es ese? Se ve que se referían a la bomba atómica de la paz o algo por el estilo.

La cuestión es que estos dos talentos, Thom Yorke a pesar de todo me gusta como decía en los otros post y por suerte también este disco suena más a él que al otro, si no fuera por un puto soniquete que se oye de fondo todo el rato y que es el maldito bajo de Flea. Nunca podré entender como el lagrimas fáciles y el saltimbanqui se hicieron amigos y como surgió semejante idea absurda y chorra de hacer un disco juntos. Puede que Flea se diera cuenta de que la vida es una mierda y fuera a buscar un abrazo como Tangana y nadie de su grupo se lo dio y acabó con Thom, puede ser, debió ser algo de peso.

Al disco lo titularon Amok que es Koma al revés, casi me hago pis cuando mi mente disléxica lo procesó.

Gracias a dios no tuvo continudad y Flea se volvió con su grupo y Thom prosiguió con Radiohead y él solito y esto, simplemente, ha quedado como una anomalía sónica para el olvido, un tropiezo de dos almas perdidas en planetas distintos incompatibles pero que creyeron ser hermanos como en el instituto. 

Madre mía, el vídeo en directo que os dejo dan ganas de quemar. Thom está a la altura de Flea, lo siento.