Hago lo que quiero.

 Los que me conocéis o seguís mi trabajo de cerca, ya sabéis que llevo años intentado dar el paso al mundo de la pintura, a fin de cuentas, es lo que estudié en la Escuela Massana, es mi pasión desde siempre y a lo que me quería dedicar de niño. Finalmente la vida dio muchas vueltas y de momento no ha podido ser, aunque las cosas, profesionalmente, me han ido muy bien desde que empecé en esto de dibujar y la creatividad, por circunstancias de la vida y las mismas que las de la mayoría, me tuve que buscar el pan para vivir y ser independiente, pero desde mis primeros trabajos en publicidad, donde ya gané varios premios en Cannes o en San Sebastian o publicando varios libros con mucho éxito, Viviendo del Cuento, El Arte, que se ha traducido hasta al Chino o Para los Míos que ha vuelto a ser un gran éxito después de mucho. O ahora que se habla tanto del premio Ondas, ya nos dieron uno hace muchos años, con la primera serie que hicimos para Televisión, concretamente para Tv3, Arròs Covat.

En definitiva he conseguido muchísimo más de lo esperado, hasta mi reciente trayectoria en la Catalunya Radio, con un efecto inesperado y descubriendo todo un nuevo público que ni me lo figuraba, todo gracias a Roger de Gràcia. En mi vida lo he pasado bien y mal, como todo el mundo, pero en lo profesional, solo he tenido éxito, el niño reprimido que fui, siempre ha luchado por salir y hacerse oír, incluso vengarse, y aquí quería llegar a parar con todo este discurso, a la pintura, al arte, a lo que siempre he considerado la libertad máxima, a lo que siempre he soñado ser, libre, como los artistas de verdad. El niño quería ensuciarse de barro como los demás. Todo es un deseo infantil que espero poder cumplir, una frustración desmedida después de cinco décadas y que se transformo en este chorro que nunca he podido frenar.
Llevo mucho tiempo bregando con galeristas sin demasiada suerte, o por llegar yo demasiado pronto o por no entenderme con ellos y es justo ahora con la entrada en escena de YOKO Art Gallery y de Xavi, que nos hemos puesto de acuerdo y voy a dar ese paso tan importante para mi, porque no hay nada más difícil que aprender a ser libre, y espero lograrlo algún día.
Os espero el día de la inauguración, 10 de Diciembre el Yoko, va a ser una gran celebración al menos para aquel niño que fui.

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