Larga vida a Turbonegro, muerte al Rock'n'Roll.

Ha muerto Hank Von Hell, el mítico cantante de Turbonegro. Grupo de rokers gays que me encantaron en su día. Su mezcla de Rock Garajero, Punk Rock Ramoniano y cultura gay me parecía de las cosas más excitantes que ha dado el Rock por última vez. Después de ellos, si no es desde lo más extremo del Metal, no me ha interesado nada. 

Ya desde el nombre del grupo es brillante y el rollo gay es lo que faltaba para redondear ese mundo testosterónico del Rock, ese mundo de machos que al final ya follan entre ellos. Es lo que he pensado siempre de los grupos de tíos de esos recalcitrantes que hacen tanta ostentación de su masculinidad, en realidad se gustan entre ellos y lo llevan fatal por tener conductas de clan. El hetero no necesita recalcar tanto que lo es puesto que la sociedad lo acepta sin problemas y todo está enfocado a serlo.

Turbonegro reventaban por los aires todo eso y el Rock volvía a ser un desafío a lo establecido, lo que realmente fue el Rock en  su origen y no un lenguaje para fascistas como es hoy en día.

El Rock se ha convertido en música para conservadores y reaccionarios, siempre tuvo ese tufo por tener todo ese poso sureño y racista. Lo que sucede, es que en el mundo de hoy, donde ser un facha se ha convertido en formar parte de una minoría que se siente amenazada y exige sus derechos como otras minorías de verdad, creen que siguen siendo rebeldes, por esto mismo, se sienten "outsiders" siendo en realidad unos rancios como la grasa amarilla del jamón, solo hay que pensar en Loquillo, Calamaro... 

Todos esos tipejos trasnochados, se merecían una buena tunda de Turbonegro y que supieran lo que es el Rock y el peligro de verdad pero Hank Von Hell ha muerto y con él, puede que el último rockero de verdad quedaba.

Larga vida a Turbonegro, muerte al Rock'n'Roll.