British Sea Power. Viajantes.

 British Sea Power son mi recuperación de la temporada.

De repente de la nada, mi mente los recuperó, puede que soñando, puede que por pura asociación con otro recuerdo, aparecieron en mi mente, con su escenario lleno de plantas y palos, como grupo telonero que ahora son cabeza de cartel, en mi propia cabeza.

Estoy repasando todos sus discos.

Maravillas chispeantes, melancólicas y alegres a la vez, épicas. Tienen la valentía de Arcade Fire sin ser unos gilipollas y la poética del mar, la metáfora del mar, del viaje y del más allá, del aventurero, del que se va para luego volver a casa.

Tienen el símbolo para el hijo del marino, del viajante, del que se va para luego traer cosas a casa.

La alegría del que vuelve a casa y la alegría de los que lo reciben. Qué bonito que es eso cuando sabes lo que es. 

El sonido de abrirse la puerta, un silbido de saludo y la estampida en casa corriendo a la puerta.

Pocas cosas más antiguas y queridas por los humanos, regresar vivo, con regalos, comida, historias.

Quien fuera marinero, viajero, emprender un largo viaje por el placer de regresar.

British Sea Power, así han vuelto a mi casa, vivos, con regalos e historias que contar. 

Estalla la estampida hacia la puerta que se abre con alegría.